Un proceso terapéutico no consiste en iluminarse o dejar de ser neurótico, se trata de poder realizar sin excesiva dificultad los ciclos de necesidades.
¿Qué es o en que consiste un ciclo de necesidades?
En la Gestalt, llamamos “ciclo de necesidades” al proceso que realizamos desde la detección (consciente o no) de una necesidad hasta su realización, bloqueo o represión.
Dicho de otro modo, el proceso que transcurre desde la identificación de una necesidad hasta su satisfacción o intento de satisfacción. Podremos entenderlo como una explicación de la dinámica que sigue una gestalt (término alemán, sin traducción directa, pero que aproximadamente significa “forma”, “totalidad”, configuración”) en su tendencia a completarse y explicaría, al mismo tiempo, como dicha gestalt puede quedar inconclusa.
La neurosis se manifiesta mediante diferentes tipos de interrupción de este ciclo, que incluye lo que podríamos llamar una fase del darse cuenta, de identificación de la necesidad, y otra de contacto, satisfacción de la necesidad.
Cuando hablamos de necesidades, no sólo nos referimos a las orgánicas, sino también a todas las necesidades de tipo psicológico y social.
Según el autor que consultemos, podemos encontrar desde las 4 fases con que Perls y Goodman dividían el proceso (precontacto, toma de contacto, pleno contacto y postcontacto), a las 5 de Ginger (precontacto, compromiso, contacto, descompromiso y asimilación) y a las 7 de Zinker. Utilizaré esta última clasificación:
Partiendo de una situación de REPOSO, aparece una necesidad en forma de SENSACIÓN. La registramos en forma de señales sensoriales, que indican un déficit del organismo. Pueden ser tanto sensaciones físicas (incomodidad, vacío en el estómago, escalofríos…) como sentimientos (tristeza, alegría, dolor, placer…).
El siguiente paso es el darse cuenta, la toma de CONCIENCIA, que no es más que ponerle nombre a la sensación (hambre, sed, necesidad de compañía…).
La movilización de energía o energetización, es el estado de excitación corporal, que nos prepara para pasar a la acción; es la disposición de todos los sentidos hacia la consecución del contacto. Sería como un calentar motores.
La respiración es un elemento muy importante que hay que tener en cuenta en esta fase, ya que el bloqueo de la misma nos llevaría a la frustración del proceso.
El cuarto paso es la ACCIÓN, comienza el movimiento o la conducta dirigidas a satisfacer la necesidad. Implica la conciencia de cómo me dirijo hacia el contacto. A nivel neurótico, este inicio a la acción puede coincidir con una desenergetización, es decir, dejo de activarme, de movilizarme para no ir hacia lo que deseo.
Sigue el CONTACTO propiamente dicho, donde la necesidad del organismo se resuelve interactuando con el entorno. Es el encuentro que implica la resolución de la acción iniciada: como, cojo, hablo o me relaciono…
Y el último paso es la RETIRADA. Una vez satisfecha la necesidad, vuelvo al estado de reposo hasta que vuelva a emerger una nueva necesidad, un nuevo ciclo. Aquí reconocemos el límite del encuentro mediante el sentimiento de satisfacción y bienestar que nos dispone hacia nuevas necesidades.
Habría otro autor, Katzeff, que añadiría otro paso entre el contacto y la retirada, que sería la CONSUMACIÓN, que es la celebración del contacto.
A efectos operativos, el ciclo tiene dos estadios claros: uno de preparación (sensación, conciencia, energetización) y el otro de resolución (acción, contacto, retirada).
En cada una de estas mitades de ciclo, la Terapia Gestalt acentúa una especie de intervención:
– En la primera, la conciencia (Terapia del darse cuenta).
– En la segunda, el contacto (Terapia de contacto).
Ambos aspectos son claves fundamentales del modelo de terapia gestáltica y dos de los nombres con los que se la denomina.
Cada parte del ciclo genera un ciclo en sí misma, ya que para avanzar en el proceso y pasar de una fase a otra, tenemos que darnos cuenta de lo que sucede en concreto, energetizarnos y llevar la acción pertinente de ese momento a cabo. Tomaremos como ejemplo la fase de toma de CONCIENCIA. Tal como os decía, la respiración juega un papel fundamental. El mini ciclo que representa esta fase, empezaría con la denominación precisa de lo que me sucede, si dejo de respirar, que es la forma de desconectarme, dejaría de sentir y de darme cuenta exactamente de lo que es, al tiempo que no me cargaría de energía y frustraría la resolución de este ciclo, con lo que sería imposible seguir avanzando y llegar al siguiente paso, que sería ponerme en marcha.
En otro post os seguiré hablando del tema.