“Yo no miento, no lo hagas tú tampoco”.
Me pasé años repitiendo esta frase, escupiéndosela a la cara a mi exmarido cuando le pillaba en un desliz, a mis hijos cuando intentaban colarme algún gol o en la escuela, durante mis años de maestra, cuando algún alumno no traía los deberes y soltaba una historia rocambolesca. Y al hacerlo me sentía superwoman.
Mentir: “Decir o manifestar lo contrario de lo que se sabe, cree o piensa”; esta es una definición, aunque también encontramos: “fingir, aparentar” o “inducir a error”. Si aplico estrictamente el primer enunciado a mi propia persona, ciertamente no mentía pero, si observo detenidamente lo que hacía bajo el prisma de la tercera definición, este sutil “inducir a error”, ¡oh sí!, he sido una mentirosa redomada y con muchísima más alevosía y premeditación que cualquiera de todos los que me rodeaban.
Durante mucho tiempo estuve totalmente convencida de que… Continue reading